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                                                                                                                                                                FUERZAS DE ORDEN
                                                                                                                                                                LAS VILLAS MISERIA

                                                                                                                                                                DUDAS
                                                                                                                                                                UN GOBIERNO MUNDIAL - JULIO 2018

                                                                                                                             - CARTAS


                                                                   

El Partido Ético es por ahora un partido virtual. Quizás en algún momento pueda convertirse en una realidad; pero ya sea que eso suceda o no, el objetivo que anhela es el de poder encausar el descontento individual ante situaciones inicuas y generar una corriente de opinión suficientemente poderosa, como para obligar a que se modifique el comportamiento de los administradores del Estado. Su simple aspiración es que los representantes designados cumplan su cometido, cuando lo absurdamente usual es que el poder político no sea empleado de manera cabal en beneficio del bien común.

DECLARACION DE PRINCIPIOS

El espíritu del Partido Ético se basa en los principios  que se enuncian a continuación, los cuales se propone  manifestar    todas las veces que sea posible, para tratar de que se incorporen profundamente en el pensamiento de la sociedad y se haga más difícil vulnerarlos.

IGUALDAD DE POSIBILIDADES
ASISTENCIA A LOS NECESITADOS
EDUCACIÓN HUMANÍSTICA
INFORMACIÓN TOTAL
AUSTERIDAD DEL ESTADO
DESARROLLO SUSTENTABLE
ÉTICA EN RELACIONES Y COMERCIO INTERNACIONAL

El objetivo permanente del Estado es procurar que todas las personas puedan contar con una igualdad básica de posibilidades para desarrollarse. Cuanto más se aproxime a esta situación ideal, más fructífera será su gestión. La asistencia a las personas que padecen situaciones de pobreza e indigencia es un deber fundamental y perentorio del Estado. Un objetivo principal es elaborar e implementar políticas que tiendan a impedir que tales situaciones se generen; pero no se puede esperar a que esas políticas comiencen a dar resultados, y quienes padezcan penurias deben tener la posibilidad de ser auxiliados con prontitud. Para ello, lo que recaude el Estado en concepto de asistencia social debe ser administrado de manera eficiente y con rapidez para paliar situaciones extremas.

Los programas de estudio, en todos sus niveles, deben contener un segmento importante de materias humanísticas. Debe aprovecharse al máximo la potencialidad que tiene la educación sistematizada, no solo sobre la adquisición de conocimientos técnicos por parte del alumno, sino también sobre su formación humana, procurando exaltar los sentimientos solidarios, haciéndolo partícipe de la búsqueda de una sociedad mas justa y enfatizando sobre los factores que son adversos a ello.

Todas las acciones del Estado deben ser de dominio público. Todo acuerdo, contrato o tratativas que realice, del mismo modo que la evolución de las cuentas públicas, tienen que ser adecuadamenta informados. Para que los recursos cubran de la mejor forma las necesidades, es necesario que el Estado se desenvuelva con la mayor austeridad. Las remuneraciones y dietas de los funcionarios deben ser mesuradas. Los medios de comunicación deben usarse exclusiva y suscintamente para dar información que por circunstancias particulares necesite ser transmitida a la población. No debe ser admitida la utilización de recursos públicos para pagar propaganda oficial o realizar actos partidarios. La consideración que el conjunto de la población mantenga de la gestión gubernamental, debe resultar exclusivamente del análisis que haga de sus acciones.

Es responsabilidad del Estado orientar y controlar las actividades productivas, procurando que se desarrollen en forma sustentable, pues la búsqueda de mayor lucro suele hacer que no sean considerados  la continuidad o los eventuales efectos perjudiciales de la actividad en el largo o incluso en el corto plazo. Se deben fomentar las actividades que permitan el reemplazo de importaciones. La producción necesaria para el consumo interno de productos de primera necesidad exportables debe contar con un precio diferencial, cuando los precios internacionales del producto sean incompatibles con el nivel promedio de salarios propio. La relación del país con el resto del mundo debe ser de búsqueda de consenso y de superación. Mas allá de falta de reciprocidad o conveniencias circunstanciales, nunca será loable tomar ventajas a costa de perjudicar a terceros, pues no debemos olvidar que todos compartimos el mismo planeta y todos deberíamos poder mejorar nuestras condiciones de vida. Con respecto a la administración de determinadas actividades de gran interés público,  creemos en la conveniencia de que la misma pueda ser asumida por el Estado, particularmente aquellas que se relacionan con algunos servicios esenciales, que estructuralmente no son rentables en ningún lugar del mundo. En contra de las opiniones que consideran que el Estado, por ineficiente, no debe asumir ninguna actividad que pueda estar en manos privadas, nuestro argumento es que el Estado cuenta a su favor con medulares ventajas comparativas respecto de ellas. Las razones de la presunta ineficacia se fundamentan en la excesiva burocratización o en los actos de corrupción que puedan surgir durante la gestión; lo cual equivale a afirmar : la imposibilidad absoluta de contar con un Estado correctamente administrado y de que la inteligencia gerencial que se consigue desarrollar en una empresa privada se traslade a él. Siendo que todo nuestro planteo apunta a alcanzar esa gestión eficiente, exigible al Estado, disentimos de esa aseveración. El hecho de que pueda regular libremente las tarifas, que cuente con eficaz capacidad de financiación a través de los impuestos y, primordialmente, que no necesite generar ganancias sino cubrir los costos y mantenimiento, son las grandes ventajas a las que aludimos. Es difícil sostener la conveniencia de privatizar servicios que no son rentables, habiendo que acordar subvenciones para compensar las pérdidas, para que se efectúen las inversiones que mantengan su prestación adecuada, y además incluyan un margen de utilidad para las empresas prestadoras. De por sí parece bastante incoherente que una empresa privada aborde una actividad no rentable y no es difícil imaginar que tarde o temprano acabarán inflando los costos y derivando una porción inferior a las inversiones que se requieren, para acrecentar ese margen de utilidad.

 Tal vez, estos principios puedan tomarse como una perogrullada; sin embargo, si se lograra que ellos sean respetados y no tan solo discursos de campañas electorales, estaríamos generando el cambio radical para que el egoísmo, la malevolencia y la desigualdad no continúen primando. Aunque sea ingenuo suponer que las actitudes contrarias al bien común pueden revertirse espontáneamente, tengamos en cuenta que no nos hallamos en una meseta, sino en una cuesta que será cada vez más difícil de subir si ese cambio no se produce. Por otra parte, es necio creer que por simple voluntarismo todo puede mejorar fácilmente; pero es imprescindible dar el primer paso, comenzar a actuar con buenos propósitos en todas las áreas. La actitud constructiva permite que los errores se analicen y se procure corregirlos. Creer en las buenas intenciones y ver avances, por pequeños que sean, posiblemente debe obrar para obtener la empatía y el apoyo de la gente. Si compartís lo expuesto difundilo y aporta tus propias ideas y propuestas, aprovechando las extraordinarias posibilidades que ofrece la red.  Un sencillo cálculo permite determinar que si un correo es enviado a dos personas, cada una de ellas envía a su vez otros dos y esta secuencia se repite veintiuna veces,  ya se supera  ampliamente el millón de envíos. También una pequeña acción, como la de adoptar una cinta verde como pulsera, puede constituir otra forma   simple y visible de manifestar el apoyo y el anhelo de cambio.


El que sigue es el texto del mail que comenzó a enviarse en agosto del año 2010

"TAL VEZ PIENSES PARECIDO...


Tal vez vos también sientas furia, asco, indignación e impotencia por la forma en que actúa la clase política argentina, su falsedad permanente y la inescrupulosidad con que hacen y deshacen sus alianzas en busca del poder.

El actual estado de crispación social y el aumento de la pobreza y la marginación, son la consecuencia inevitable de las prácticas corruptas ejercidas durante tanto tiempo y con notoria impunidad por diferentes gobiernos. Y como todo se va perfeccionando con el tiempo y la práctica, angustia imaginar el nivel de corrupción que debe haber en estos momentos en el manejo de la cosa pública y del cual solo llegan a trascender algunos hechos como punta de iceberg.

Salvo que se produzca un milagro, la forma en que proceden no va a cambiar, pero no debemos resignarnos a esta situación absurda de aceptar los abusos de quienes elegimos para velar por el bien común y procurar con acciones individuales modificar este estado de cosas.

Aunque no debería ser necesario, vale recordar lo siguiente:

La misión principal del Estado es la de procurar el mayor grado de bienestar, igualdad de posibilidades y desarrollo para todos los habitantes.

En función de ello, el Estado debe asegurar el acceso a la educación y a la salud de toda la población. Salud no se limita solo a la asistencia sanitaria, sino que implica también que ningún habitante debería padecer hambre ni vivir en condiciones indignas.

Todas las acciones deben tender fundamentalmente a lograr esos objetivos básicos, ya que si se aparta de ellos la existencia del Estado carece de sentido.

Y algunas condiciones esenciales para aspirar a esas metas:

Como delegados de los electores, depositarios y administradores de los recursos públicos, cualquier acto de corrupción de jefes o funcionarios de estado constituye delito gravísimo, debe privar automáticamente de todo fuero, y ser penalizado sin dilaciones, con el máximo rigor que contemple la ley.

Los actos, contratos y acuerdos del Estado deben ser de dominio público, sin excepciones y en todos sus detalles.

El Estado debe desenvolverse con la máxima austeridad y no puede emplear medios ni recursos públicos en acciones de propaganda política.

Prohibición absoluta de designar en cargos públicos a parientes de jefes o funcionarios de gobierno.

Obligación de los partidos políticos de dar a conocer en forma adecuada sus plataformas, y la descripción exhaustiva y pormenorizada de las acciones que proyectan y de cómo las instrumentarán en caso de resultar elegidos.

La propuesta para impedir que la actual situación se perpetúe es:

Concordar en que las funciones del gobierno son las apuntadas mas arriba.

Concordar en que para que ellas se realicen adecuadamente el gobierno debe combatir en forma permanente la corrupción, que es el principal enemigo del desarrollo ( la creencia de que algo de corrupción es admisible e inevitable nos parece nefasta; no han sido los errores o la impericia de los gobiernos sino su deshonestidad, la que, en un país con importantes recursos naturales y baja densidad de habitantes, ha hecho crecer brutalmente la pobreza y condenado a la marginación a infinidad de nuestros semejantes ).

Pugnar por la creación de un partido político nuevo, que sea conformado por personas que no tengan ninguna vinculación con los partidos vigentes y que estén realmente comprometidas a trabajar por el bien común, para lo cual se necesitan, básicamente, solo dos condiciones: honestidad e inteligencia. Un partido que no constituya un desprendimiento o adopte sin debatir la ideología de ningún movimiento anterior, que rechace cualquier tipo de fundamentalismo político y que sea capaz de reconocer y corregir los errores que cometa. Tal vez alguna ONG o asociación solidaria ya existentes puedan convertirse en su base.

Hemos elegido denominarlo PARTIDO ÉTICO y adoptar el color verde como su distintivo.

¿Cómo podemos contribuir a intentar el cambio?

Reenviando este mail a nuestros conocidos para intentar que la idea se difunda y se instale, aprovechando la gran posibilidad que nos brinda la red.

Reenviándolo también a quien te lo envió, para que sepa que la propuesta te interesó.

Usando una cinta verde como pulsera, como manifestación visible del anhelo de cambio y del rechazo a la permanente falsedad de la clase política imperante.

Persistiendo en esta propuesta y en su divulgación, pues si seguimos aguardando ingenuamente un cambio positivo de la corporación política que padecemos, la enorme desigualdad continuará aumentando, será cada vez más difícil de modificar, y le estaremos legando a nuestros hijos y nietos un futuro mucho peor que este presente que nos toca. "

APUNTES

LOS PARTIDOS  

Que poco probable parece ser inducir algún cambio de opinión valiéndose de la palabra escrita. Sobre todo en materia política, donde es habitual que los argumentos se cambien y manipulen de acuerdo a las conveniencias circunstanciales, sin el menor escrúpulo ni intento de justificación, como si la gente fuera amnésica o tan maleable que no fuera necesario hacerlo.

Emplear solo los elementos favorables para defender una posición, ignorando los argumentos de quienes se oponen a ella, es seguramente una característica habitual de la condición humana; pero la manera tajante y la pasmosa suficiencia con la que los opositores políticos esgrimen argumentos que son totalmente antagónicos sobre un mismo asunto en discusión, forzosamente provoca escepticismo y avala la sospecha sobre la falsedad de sus discursos.

Por la forma en que se desenvuelven los partidos políticos en nuestro medio, conjeturamos que quienes se incorporan a ellos  tarde o  temprano se deben ver enfrentados a que el altruismo y la vocación de servicio son solo enunciados vacíos, y que lo que realmente importa es aumentar las chances de triunfo, fin para el cual todos los medios pueden justificarse. Algunos abandonarán la carrera desencantados y otros aceptarán las reglas; probablemente aquellos que logren manejarse con mas habilidad en el juego de intrigas internas y puedan ser mas carismáticos para el público terminarán encabezando las listas.

Este, desgraciadamente, parece ser el modus operandi del que se han imbuido todos los partidos tradicionales y que también traen consigo los nuevos partidos que surgen, en su condición de desprendimientos o mutaciones de aquellos.

Sin embargo, quizás aún peor que esta traición al fundamento mismo de su razón de ser  -procurar el bien común sobre cualquier otro objetivo-, sea, que al repetirse una y otra vez la misma situación acabemos por considerarla inexorable, una suerte de castigo divino del cual no podemos sustraernos, y, que nuestra patética opción sea abstenernos de votar o hacerlo por quienes, subjetivamente, nos parezcan menos dañinos.

No imaginamos otra posibilidad para salir de esta recurrencia nociva, que la de impulsar la creación de un nuevo partido, con las características que ya planteamos en el primer escrito:

"Pugnar por la creación de un partido político nuevo, que sea conformado por personas que no tengan ninguna vinculación con los partidos vigentes y que estén realmente comprometidas a trabajar por el bien común, para lo cual se necesitan, básicamente, solo dos condiciones: honestidad e inteligencia. Un partido que no constituya un desprendimiento o adopte sin debatir la ideología de ningún movimiento anterior, que rechace cualquier tipo de fundamentalismo político y que sea capaz de reconocer y corregir los errores que cometa. "

Que llegue a materializarse y tener un consenso importante parece un objetivo casi utópico; pero no menos utópico es esperar un giro espontáneo en el comportamiento de los actuales partidos.


VIOLENCIA

El crecimiento de las actitudes de violencia en la sociedad, en los últimos años, es una realidad lamentablemtente innegable y pareciera ser una tendencia irreversible o casi imposible de modificar. No se trata de un fenómeno casual, y si se lo analiza con un mínimo de lucidez se concluye que su génesis radica en  la desigualdad cada vez mayor que impera en el mundo. Negar esta razón, es pretender que la multitud de seres que crecen en condiciones infrahumanas: hacinados en alguna de las villas precarias que proliferan sin cesar o viviendo en la calle, mal alimentados, víctimas propicias de los traficantes de drogas baratas, en un ambiente cruel, carentes de afecto y de esperanza, con ínfimas posibilidades de acceder a una educación adecuada, y en consecuencia a un mercado de trabajo que se reduce inexorablemente y no cesa de aumentar sus exigencias; acepten resignada y estoicamente su marginación sin manifestar resentimiento por ello. Si tal como creemos, el crecimientos de la violencia tiene relación directa con el aumento de la marginación, la represión, por sí sóla, mal puede modificar esta situación, pues no va más allá de actuar sobre los efectos, y no sobre las causas; cabiéndole la culpabilidad fundamental al Estado, al permitir, por acción u omisión, que esas condiciones se extiendan, cuando tiene las herramientas y la obligación fundamental de volcar sus mayores esfuerzos para ir reduciendo tal situación de injusto desequilibrio social. Como ejercicio de conciencia, es bueno tener presente que el hecho de nacer en un ambiente adecuado o en situación de marginalidad es sólo una cuestión de azar.

Paralelamente, es vital eliminar la tenencia de armas en la población civil, extremando todas las limitaciones que haya al respecto, con una estrategia de controles policiales asiduos y coherentes en la vía pública. Si esos controles son eficientes, harán más difícil portar un arma sin ser aprehendido y encarcelado, y con un agravamientos sustancial de la pena en caso de reincidencia. La posesión de armas en mano de los particulares es impropio de una sociedad civilizada, y aunque su reducción sea sólo un paliativo que no actúa sobre los factores que generan los delitos, al menos podrá contribuir a que disminuyan sus consecuencias más trágicas. También la portación de armas blancas o manifiestamente contundentes debería considerarse como delito y  penalizada en un grado proporcional. 

Percibimos también otro género de violencia; una violencia casi inclasificable, difícil de entender, que quizás cupiera atribuir a una inducción reiterada de actitudes nocivas, capaces de hacer aflorar los impulsos más oscuros de la naturaleza humana. Si un niño maltratado se transforma más tarde en un padre que maltrata o en un cónyuge violento, significa que ha asumido el maltrato que padeció como algo natural; y esta espantosa continuidad no está relacionada específicamente con el nivel cultural o económico del entorno familiar. Suceden entonces algunos hechos atroces, incomprensibles, ante los cuales uno se pregunta atónito que fue lo que hizo esa persona en su vida, antes de cometer tal aberracón. Y lamentablemente, debemos de asumir que posiblemente existe un cierto grado de crueldad que es inherente a la condición humana. Un ejemplo de ello, es tal vez la propensión que suelen mostrar los niños por dañar insectos o pequeños animales que estén a su alcance; y si esas actitudes, en lugar de ser corregidas de inmediato, son toleradas o incluso festejadas, es seguramente una de las maneras de ir forjando una personalidad violenta para el futuro. He aquí porque queremos bregar y hacer hincapié en la importancia fundamental de incorporar contenidos humanistas en los programas educativos, que en todos los niveles inculquen la solidaridad, la preocupación por quienes padecen y la necesidad de encaminarnos a una sociedad sin injusticias.

A su vez, no puede haber ningún grado de permisividad ante las actitudes violentas o la incitación a las mismas y se las debe sancionar con toda la severidad que contemplen las leyes. La brutalidad en los estadios de fútbol; las peleas feroces a las salidas de los boliches; la incitación a los jóvenes al consumo de alcohol, e incluso la morbosidad con que los noticieros de televisión suelen explayarse largamente sobre crímenes aberrantes, son apenas algunos ejemplos de esa deprimente exacerbación que aflige a la sociedad y a la cual hay que oponerse con todos los medios.

INFAMIA

El narcotráfico constituye, a nuestro juicio, no sólo uno de los crímenes más viles e imperdonables que se cometen, sino también uno de los factores fundamentales de descomposición moral, articulado sobre su capacidad de comprar voluntades mediante el soborno y de proveer enormes sumas de dinero para promover negocios o empresas, que por su propio origen, forzosamente deben ser sospechadas. Con respecto a la malignidad del delito, resulta difícil encontrar acción más monstruoso que la de lucrar con la degradación de sus semejantes, provocando a su vez la terrible aflicción de las familias de las víctimas. Para evidenciar sus consecuencias deletéreas para la sociedad, basta con observar lo que sucede en los países en los cuales esta actividad infame está más extendida. La lucha, pues, contra el narcotráfico es una prioridad vital que debe plantearse a partir de acciones múltiples. Como medida básica, es necesario agravar las penas para estos delitos, contemplando la prisión perpetua para los cabecillas, sin posibilidad de solicitar la libertad condicional antes de 30 años, y aumentando en forma contundente el tiempo de reclusión para cómplices y partícipes.

 A priori, se puede conjeturar que no debe resultar difícil identificar a los vendedores, eslabones finales de la cadena, pues por fuerza están expuestos cada vez que le venden  droga a un consumidor;  y en esto, también los vecinos o cualquier observador circunstancial pueden convertirse en herramientas invalorables, si se establece un canal de comunicación eficaz con las fuerzas policiales, habilitando por ejemplo una línea telefónica especial y una dirección en la web para recibir denuncias. A partir de la localización de un vendedor, una labor de seguimiento e inteligencia adecuada debe permitir ubicar y apresar a componentes superiores de la red delictiva, y si el agravamiento de las penas se concreta, existirán más posibilidades de obtener información que permita aprehender a los cabecillas de las organizaciones, a cambio de reducir la condena de los informantes.

Las campañas de información y concienciación sobre el flagelo de la droga deben ser permanentes. Más allá del público adulto, resulta incomprensible que no se impartan, al menos en los colegios primario y secundarios, clases periódicas dedicadas exclusivamente a explicar a los niños y adolescentes, del modo más acorde con su edad, el daño terrible que éstas entrañan. Es tal vez, uno de los ejemplos más notorios de como se desaprovecha, en tantos aspectos, la oportunidad de ejercer una influencia valiosa sobre mentes y espíritus que en esa etapa de su desarrollo son tan receptivos.

Para asistir a las personas adictas se debería contar con la cantidad necesaria de centros públicos, provistos de óptimos especialistas y medios para brindar la mejor ayuda que sea posible.

Cabe por último, considerar que estas redes criminales no podrían  establecerse y prosperar como lo hacen, de no mediar algún nivel de connivencia y complicidad con quienes deben precisamente combatirlas. Desbaratarlas, implica también obtener la información necesaria en las investigaciones, para poner al descubierto a aquellos funcionarios que las hayan favorecido, y condenarlos con todos los agravantes que les cupiere por la función investida.

La alternativa de despenalizar el consumo, que las personas adictas puedan registrarse, ser proveídas por el Estado y aceptar planes de tratamiento, es una opción que debería ser analizada exhaustivamente, como un medio con posibilidades para asfixiar el negocio del narcotráfico. Se trataría, sin duda, de apelar a una medida radical, con resultados y consecuencias muy difíciles de prever; quizás la realización de una prueba a escala reducida, con un grupo de personas adictas que se presten al ensayo, proporcionaría información valiosa para evaluar los posibles beneficios o perjuicios que derivarían de su implementación. 

Llegó al blog un comentario con una interesante propuesta: incorporar a familiares de adictos en la investigación de los delitos de narcotráfico. El mentor de la propuesta supone bien, que parece casi  imposible que se pueda seducir a las personas que sufren o sufrieron la terrible aflicción de ver el padecimiento de sus seres queridos, impulsándolas a desviarse de su cometido. Podrían desempeñar una tarea inmejorable, si en un departamento creado a tales fines se les encargara de recibir y analizar las denuncias, considerar su verosimilitud, recomendar 
en base a ello el orden de los procedimientos y auditar la realización y resultados de los mismos.




TRABAJO Y POBLACIÓN

La extraordinaria aceleración de los adelantos tecnológicos que se viene produciendo en los últimos años, es un factor de cambios radicales en la situación del empleo, ya que inexorablemente provoca una creciente reducción de puestos de trabajo, agravada a su vez por la mayor necesidad   de ellos que genera el crecimiento vegetativo de la población. En la medida que los puestos de trabajo continúen disminuyendo, el panorama futuro puede ser calamitoso; sin embargo, cuando se habla de desempleo, se lo sigue considerando como una circunstancia coyuntural, atribuible a las incorrectas políticas económicas desarrolladas por el país que lo padece, y por consiguiente posible de revertir. Sostenemos, en cambio, que son los avances de una crisis que será inercialmente inevitable, y nos parece esto tan obvio y de implicancias tan graves, que nos resulta extraño que sea una cuestión no asumida y que no pareciera haberse encarado hasta ahora un análisis riguroso y a nivel mundial, de como enfrentarla.

La posibilidad de trabajar es un derecho inalienable del ser humano; cualquier persona que no consigue emplearse o que haya sido despedidad de su trabajo, sabe de la profunda angustia que crece en ella a medida que transcurren los días y de la sensación absolutamente justificada de marginación que se experimenta. Si imaginamos un escenario futuro con un elevadísimo porcentaje de desocupados, sin mínimas esperanzas de lograr empleo y la convulsión social que entonces devendrá, vemos la urgencia de encontrar alternativas viables que impidan llegar a tal situación.

Puestos a tratar de analizar los numerosos factores que se relacionan con esta cuestión, intuimos que llegaríamos a conclusiones seguramente controversiales, pues básicamente creemos que el obstáculo primordial tiene su origen, de una u otra forma, en el ya aludido incremente ilimitado de la población, la mala distribución y el despilfarro de los recursos.

Las estadísticas indican que aproximadamente el 20% de la población mundial se distribuye el 80% del dinero, y, a la inversa, el 80% restante recibe sólo el 20%. Alrededor de la mitad de la humanidad se debate entre la pobreza y la pobreza extrema o indigencia. La tendencia a la concentración de la riqueza hace que las empresas de gran capacidad financiera crezcan mediante fusiones o adquisición de otras, se ramifiquen en diversas áreas y vayan monopolizando el mercado. Es innegable que el fin de los grandes grupos económicos es acrecentar al máximo sus ganancias, pero la cuestión de como sus acciones afectan la situación de las personas, más allá de su rol de potenciales consumidores, pareciera no estar dentro de sus preocupaciones.  Y he aquí el gran contrasentido, una estrechez de miras que las enfoca a lograr la mayor rentabilidad en el menor tiempo, apelando inclusive a mudar su producción a terceros países, donde exista la posibilidad de obtener mano de obra más barata, en desmedro del empleo en su propio país, sin considerar que ese rumbo irá estrangulando paulatinamente la capacidad de los consumidores. No tenemos dudas, por otra parte, de que estas poderosas multinacionales ejercen secretas presiones en los países donde actúan para obtener las medidas que las favorezcan.

El despilfarro de los recursos tiene dos vertientes opuestas: las características de ex profeso efímeras de los bienes que se fabrican, o el costo desmesurado que se requiere para producir otros, ultra sofisticados, con profusión de lujo y aditamentos innecesarios para su función. Es notorio que la mayoría de los productos que se elaboran en la actualidad tienen una vida útil mucho más limitada de los que se producían atiguamente, por la inferior calidad de los materiales que se emplean, la no provisión de repuestos y el cambio de normas. La estrategia consiste en que el consumidor deba reemplazar lo antes posible el producto y el ritmo de producción no decaiga, para lo que también se recurre a un bombardeo publicitario que induzca al público a cambiar el artículo que aún utilizan por otro de un modelo más nuevo, el cual, probablemente, ya estaba en los planos y con fecha de lanzamiento programada cuando el anterior era puesto a la venta.

Aún si fuera posible que la totalidad de los materiales empleados en los productos que se reemplazan pudiera reciclarse, en lugar de convertirse en deshechos que pasan a agravar la polución del planeta, ese reciclado obliga igualmente a un gasto adicional de energía.

Se plantea así una disyuntiva crucial: si se intenta disminuir el consumo, se reduce el gasto pero se requiere emplear menos mano de obra al bajar la producción. Sin embargo, esta relación no ha sido tan lineal. Por un lado, como mencionamos al comienzo, el imparable avance tecnológico hace que cada vez se necesiten menos trabajadores. También, en un período de relativa bonanza y tal como era razonable, ya que las innovaciones deberían redundar en condiciones menos esforzadas para ellos, se estableció en algunos países la reducción de los horarios laborales. Pero aprovechándose de la creciente dificultad para conseguir empleo y de la posibilidad de reducir costos, se han generado al mismo tiempo condiciones propicias para la posible explotación de las personas contratadas: menores sueldos, mayores exigencias, extensión de horarios, no pago de horas extraordinarias, etc. Obsérvese, a nivel local, que se aprobó - y en una votación sospechada de irregularidades - una ley de "flexibilidad laboral" que eliminó de un plumazo mejoras en las condiciones de trabajo, que habían demandado décadas de reclamos para ser incorporadas.

El aumento de la población mundial representa, a nuestro parecer, otra carga insostenible para el futuro. Con el ritmo de crecimiento actual, se calcula que se pasará de los 7.500 millones de habitante alcanzados a fines del 2011, a 8.500 en el año 2050, y se llegaría a los 10.000 millones a fines de siglo. Aún dejando de lado los ominosos pronósticos sobre cambios climáticos y  calamidades que se ciernen sobre el planeta, como consecuencia de la exagerada actividad humana - que parecen estar avalados, por ejemplo, por señales tan preocupantes como el alarmante retroceso de las masas de hielo permanentes -, resulta inimaginable que se puedan obtener los recursos necesarios para sustentar adecuadamente a tantas personas. Por duro y odioso que parezca, creemos que debería discutirse cuanto antes un acuerdo mundial para limitar el número de hijos permitidos por cada pareja, para que el nivel de población no siga creciendo.

Cambiar el orden económico establecido parece una propuesta casi inalcanzable;  sin embargo tal vez la paz mundial dependa de lograrlo. La actividad mercantil tiene que propender a una situación de mayor equilibrio entre la rentabilidad y el sostenimiento de la capacidad de la sociedad en general para cubrir sus necesidades. Una alternativa para generar mayor ocupación y al mismo tiempo descomprimir las grandes concentraciones urbanas, sería favorecer la creación de colonias agrícolas que resulten sustentables para un número importante de pobladores, con uso de energías limpias y las condiciones menos arduas que ofrecen las nuevas tecnologías. Pero nos cruza por la imaginación, que el andamiaje sólido para una sociedad mas justa y alejada de conflictos, sería poder alcanzar un acuerdo general para introducir en los actuales modelos económicos, cambios tales que permitieran que cada puesto de trabajo se dividiera entre dos personas, ya sea implementando sendos turnos diarios de menos horas o alternando los días de concurrencia, sin resultar deficitarios. Creemos que no es una idea descabellada y que si ese objetivo se planteara en forma mancomunada y decididamente, considerando los beneficios radicales que reportaría, al permitir una ocupación plena, sería en algun momento posible de lograr. Analizándolo desde una perspectiva histórica, podría considerárselo como una etapa lógica del proceso evolutivo del trabajo,  transcurrido ya casi tres siglos desde las penosas condiciones laborales imperantes en los albores de la revolución industrial , que le permitiría al hombre disponer de más tiempo para el esparcimiento y la creación.

FUERZAS DE ORDEN

La fragilidad de las relaciones mundiales ante la creciente inequidad y la persistencia de demenciales conflictos territoriales, étnicos o religiosos en pleno siglo XXI, patentiza la necesidad impostergable de oponerse a todo factor que contribuya a este estado de cosas. La existencia de las fuerzas armadas en función de expectativas bélicas con otras naciones debería ser replanteadada.  No sólo es exorbitante e inmoral el gasto mundial en armamentos, sino que el irracional arsenal de armas nucleares acumulado pone a la humanidad al borde del abismo, pues más allá de su eventual empleo en una guerra, siempre está latente la posibilidad de que se produzcan fallas humanas, accidentes, o que (sólo en los últimos tiempos parecen mostrar preocupación por algo que hace mucho resultó obvio) alguna organización extremista pueda acceder a ellas. Los actos de barbarie inaudita que se han cometido a lo largo de la historia, son sobrados motivos para sentir temor y evidencia palmaria de la intrínseca inmoralidad y estupìdez que existe en la investigación, desarrollo y acumulación de armas de destrucción masiva.

Lo que proponemos es considerar la reconversión de nuestras actuales fuerzas armadas, despojándolas de las expectativas de guerra contra otras naciones, para plasmar una fuerza de seguridad interior, cuantitativamente menor, pero de aptitud superlativa. Quienes la integrasen, continuarían recibiendo adiestramiento básico en las tradicionales ramas terrestres, navales o aéreas, pero conjuntamente se les impartiría instrucción máxima para desempeñarse como fuerzas de policía, gendarmería o prefectura, y  enfrentar eficientemente a la creciente violencia urbana.

La condición excluyente que debería observarse con respecto a los integrantes de esta fuerza, además de una instruccón exhaustiva, es la de que superasen los más complejos exámenes sicológicos, para tener un máximo razonable de seguridad de que cuenten con el equilibrio necesario para portar armas y custodiar delincuentes. Sumándose a estos recaudos, una sección de Asuntos Internos capaz de actuar  con total independencia y rigurosidad. En todo momento, la  retribución de los agentes de orden debería ser excelente, acorde a la difícil y riesgosa tarea a desempeñar. 

Tras esta propuesta, que tiene la pretensión de mejorar substancialmente la seguridad interior, subyacen algunas rexlexiones que probablemente irritarán a muchos, y que versan
sobre el cometido de la profesión militar. Analizándola de manera objetiva, absorbe a un gran número  de personas laboralmente activas, alistándolas para acontecimientos que, afortunadamente, es por demás improbable que se produzcan; y a su vez equipar con armamento que habrá que renovar periódicamente ,  pues se volverá obsoleto sin ser empleado. 

No es esta una idea original: Costa Rica, por caso, un país pequeño pero ubicado en una región históricamente conflictiva como centroamérica, decidió suprimir el ejército en 1948; respaldándose en la seguridad de acuerdos como el Pacto de Bogotá o los que confiere la ONU.

Así, con parte de los importantes recursos que se ahorrarían al pescindir del ejército, se podría equipar a estas fuerzas de seguridad interior con el mejor equipamiento y dotarlos de remuneraciones acordes a su tarea.

Sin duda, la realización de un plebiscito constituiría la mejor herramienta  para conocer la opinión mayoritaria de los ciudadanos sobre una propuesta como la aquí planteamos.

 

VILLAS MISERIA

Las villas miseria, en continua expansión, son la señal más extrema e inequívoca de las malas políticas, y, sin lugar a dudas, uno de los principales reservorios de violencia, incrementada aún más en los últimos tiempos por el auge infame del narcotráfico. Son tan diversos y tan profundos los males que alimentan su existencia, que parece una cuestión imposible de resolver; pero mientras sigan existiendo será absurdo afirmar que la sociedad que las alberga progresa. Es evidente, aún prescindiendo de los aspectos humanitarios y ateniéndose sólo a un elemental instinto de conservación, que su existencia imposibilita cualquier esperanza de paz social.

Si se asume que su eliminación es una cuestión vital y prioritaria, resulta claro que el Estado debe proceder con el máximo de austeridad en la administración de los recursos que recauda, evitando toda clase de gastos superfluos, y dando el mejor destino a los que derive a procurar su erradicación.

Tratándose de un problema tan agudo y complejo, si se pretende contar con perspectivas de éxito, es imprescindible elaborar planes que contemplen cada uno los factores que lo componen. Por su magnitud es irreal pensar en proyectos faraónicos, apuntando en cambio a producir cambios paulatinos y que tengan visos de factibilidad; analizar los resultados y hacer las modificaciones que resulten necesarias. Si se  elabora un proyecto integral y sostenible, creemos que contaría con un apoyo casi unánime de la gente, habría  disposición a colaborar y, seguramente se incorporaría una cantidad importante de voluntarios para trabajar ad-honorem, al existir el respaldo del Estado.

Se nos ocurren las siguientes acciones para tratar de la manera más integral posible los problemas principales: 1) Establecer en las villas, comenzando por las de mayor dimensión, centros que cuenten con asistentes sociales y personal policial en forma permanente.  2) Organizar comedores que puedan brindar al menos una comida diaria a los pobladores que lo necesiten. 3) Instalar un baño público, con sanitarios, duchas y piletas para lavar, con prestación acorde al número de pobladores. 4) Asegurar que todos los niños concurran al colegio y fomentar cursos de instrucción para adultos en aulas ad-hoc, construidas en la misma villa. 5) Organizar guarderías para los niños de los padres que tengan trabajo. Seguramente parezcan propuestas demasiado ambiciosas, onerosas y difíciles de implementar; pero no son imposibles. Se puede recurrir a voluntarios externos y dar tarea en forma alternada a un número importante de pobladores, para ocuparse del funcionamiento de los comedores, las guarderías y el cuidado de las instalaciones sanitarias. Para abastecer a los comedores, se puede pedir a los proveedores que vendan los suministros necesarios al costo o con márgenes reducidos. También se debería canalizar en un sólo centro todas las donaciones de alimentos, ropas y enseres, haciéndolo simple para el donante y eficaz en la distribuición. En un ambiente tan inhumano como el de las villas, seguramente se presentarán obstáculos de mayor o menor gravedad, pero con persistencia y buena gestión, es decir, el Estado auditando de manera eficiente que no se produzca ningún tipo de desvío de la asistencia (y actuando vigorosamente contra los traficantes) se mejorarían las condiciones.

Con respecto a la construcción de viviendas, sirve de poco edificar algunas pocas de manera discontinua, sobre todo si terminan costando mucho más de lo que debieran y sin un plan bien estructurado. Vale la pena leer los argumentos del arquitecto J.Grinberg en la carta que publicó el diario La Nación el 19.12.10 (ver "Cartas"). Lo aconsejable sería convocar a un equipo de arquitectos e ingenieros para que elaboren un diseño tipo  que reúna la funcionalidad mínima imprescindible, buenas condiciones de perdurabilidad y una estética adecuada; con el empleo de todas las innovaciones de elementos y materiales que permitan reducir costos y tiempo de construcción.

La adjudicación de viviendas se haría en forma de comodatos renovables y debería ceñirse a estrictos requisitos, implementando pautas para priorizar a las familias que mejor calificasen, en base a la participación de los adultos en la propia construcción, en las labores comunitarias efectuadas en la villa o fuera de ellas, etc. También tendrían que asistir a charlas previas sobre los cuidados y mantenimiento de las viviendas y espacios comunes, y de normas atenientes a la correcta convivencia vecinal. La falta de cumplimiento de estos cuidados, que se controlarían por medio de visitas periódicas, los haría pasibles de la pérdida del comodato.

Sería falto de rigor, soslayar la cuestión primordial de como poder dar trabajo a los desocupados, que seguramente constituyen un porcentaje alto de la población de las villas, considerando que frente a  un panorama, en términos reales, de oferta  decreciente de empleo, obtenerlo es aún más difícil para ellos. Ante ese punto, que quizás sea el componente principal de la matriz generadora de las villas, sería ilusorio tratar de proponer soluciones fáciles; pero esta realidad no debe constituirse en una razón para frenar  proyectos de erradicación.

DUDAS
 
Las dudas sobre el valor de nuestras propuestas son permanentes, por lo necio que significa creer que nuestra manera de pensar es la mas atinada y que debería ser mayoritariamente compartida, cuando la realidad es que cada ser humano es único y distinto en su forma de pensar. No obstante, sentimos como verdad absoluta, que cualquier acción premeditada que perjudique a otras personas en nuestro beneficio, por ajenas o desconocidas que nos sean, es una vileza, y a su vez contraria a la propia conservación pues corroe el cuerpo de la sociedad. En función de ello, sostenemos que todo acto de corrupción, aún el que luzca más insignificante, es nocivo, pues indefectiblemente implica un perjuicio para terceros; siendo además, que por su propia naturaleza, la corrupción no es un fenómeno acotado, sino que tiende a la expansión.

Seguro es que la mayoría de las personas posee sentimientos solidarios y desea vivir en una sociedad sin injusticias; pero desgraciada e indiscutiblemente destruir es mucho más facil que construir, y ello permite que la malevolencia de pocos pueda generar enormes daños, lo que obliga a que la sociedad y el Estado deban estar permanentemente alertas y extremar los recaudos para impedir sin dilaciones que prosperen aquellos planes que atenten contra el bien común.

Nuestro anhelo es que las propuestas acá esbozadas tengan la entidad mínima para despertar el interés de quienes las lean, y los impulsen a participar con sus propios proyectos, ideas y críticas, constituyendo así un foro de debate, donde todos los que sientan la gran necesidad de producir cambios puedan manifestarse.

UN GOBIERNO MUNDIAL -  julio 2018

Parece cercano el momento en que el mundo compartía el fin de siglo e ingresaba a una fecha cargada de simbolismo y expectación: el año 2000. Había cierta inquietud por la amenaza de que fallos en las computadoras podrían provocar un colapso global; pero probablemente en el ánimo de la mayoría de las personas primaban sentimientos esperanzadores. Los increíbles y continuos desarrollos tecnológicos, en los más diversos campos, auguraban que las condiciones de vida habrían de ser cada vez mejores. Han transcurrido casi dos décadas desde aquel momento y esas esperanzas no se han materializado: la desigualdad, la violencia y el desahucio de gran parte de la población mundial no cesan de aumentar; y es muy difícil creer en un acontecimiento, en algún mágico disparador que pueda modificar esta inercia malhadada.

Tras el desarrollo de la bomba atómica, se le atribuye a Albert Einstein haber afirmado que era necesario crear un gobierno mundial para evitar el riesgo de aniquilación planetaria; una posibilidad que sigue estando presente, con artefactos muchísimo más destructivos y el conocimiento al alcance de todos, incluido de organizaciones terroristas; y creo que esa propuesta, que parece utópica, tendrá finalmente que ser considerada como única alternativa para asegurar el futuro. Sólo la participación global mancomunada puede realmente asistir a las necesidades más acuciantes de aquellos países sumidos en la pobreza; afrontar mejor las catástrofes ambientales y tomar decisiones para administrar la sustentabilidad de los recursos naturales del planeta, explotados cada vez de forma más salvaje en aras de la acumulación de ganancias. La concreción de un gobierno mundial parece una posibilidad exageradamente ilusoria, pero no es imposible, y ya fue creado un organismo como Naciones Unidas, integrado por gran parte de los Estados, que procura ejercer ese rol. Debería lograrse su desarrollo ideal, con representación de todos los países, y con la potestad ejecutiva y los medios para llevar a cabo las medidas y acciones que se decidieran en esa asamblea mundial; que por su propia naturaleza no favorecerían a algunos en desmedro de otros, sino que harían al beneficio general y a una utilización racional de los recursos. Haría que terminaran los enormes gastos en armamento y se eliminaran las siniestras armas nucleares, químicas y bacteriológicas; que eliminando las barreras comerciales la producción de alimentos creciera y se optimizara; que se asegurara la educación universal; que ante la probable disminución del empleo por el desarrollo tecnológico, se lo distribuyera entre más personas en jornadas más cortas; que se combatiera con mayor eficacia al delito, que a su vez disminuiría al mejorar las condiciones de vida.

Sin duda, sugerir la posibilidad de un gobierno mundial parece una propuesta casi imposible de llevar a cabo, un desmesurado deus ex machina, que en el mejor de los casos demandaría muchísimo tiempo para constituirse y lograr resultados; pero analizando lo acontecido hasta ahora, ¿es posible creer que persistiendo en la actual conformación política y económica del mundo mejorarán las condiciones de vida para las futuras generaciones?

CARTAS

LA CRUDA MISERIA DE ESTOS TIEMPOS


Los que pasamos los sesenta años tenemos el recuerdo fresco de nuestros orígenes. Vivíamos en Junín, mi padre ferroviario y mi madre ama de casa, vivíamos en una casa chorizo que el ferrocarril había financiado y que a mi padre le descontaban de sus haberes mensuales. 
... Tenía la ropa justa para ir al colegio y por las tardes me aburría jugando con mis soldaditos en el pasillo de la casa, que era muy fresco. Éramos pobres, pero la pobreza era digna y muchos de mi generación pudimos ir a la universidad. Era la Argentina de la movilidad social ascendente.
 La miseria que veo en estos últimos años es imperdonable, indigna. Siento que hemos fracasado como sociedad, permitiendo la existencia de la indignidad, el robo de las esperanzas y sueños. La miseria es un insulto a la condición humana y solamente políticos y dirigentes miserables han podido llevarnos a esto.
La droga, el alcoholismo y la inseguridad son parte de esta decadencia. ¿Podremos revertir esto?


Esteban T. - Clarín 16.01.17

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EVALUACIÓN

...  Pero, ¿quiénes son los evaluadores? ¿Están capacitados para ésta función? Existe la posibilidad de que todos los funcionarios públicos tengan previo a ocupar sus cargos un examen, una evaluación, un psicotécnico para determinar su aptitud. Estamos como estamos por el dedo, la militancia y el número a ocupar en una lista sábana, salvo excepciones.

José S. - Clarín 19.10.16  


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CAMBIAR LA ESCUELA

...No creo que este modelo de escuela actual esté ayudando a los niños a aprender. Es lamentable pero es así. Hay habilidades que se dejan de lado en función de agregar contenidos, que muy pronto se vacían en las pequeñas grandes mentes de los chicos. El mundo actual pide y reclama gente que descubra sus talentos y los utilice para hacer el bien. La escuela no despierta pasiones. Tengo la esperanza de que esto cambie, lo creo posible. Cuando la realidad se inunda de fracasos, decepciones, oficios y trabajos frustrados en pos de realizar lo que más ingresos retribuye; cuando los gobiernos ya no saben qué hacer y los ciudadanos tampoco es porque hay que volver a empezar. Un mundo mejor es posible. Soy maestra. Lo digo con orgullo, porque la palabra me define. Cada día entro a mi escuela, con la ilusión de que mi presencia pueda movilizar la existencia de otros.

Roberta G. - La Nación 20.08.16


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NIÑEZ

Cuantos niños piden en el microcentro y duermen a la intemperie, lejos de sus hogares, si es que tienen. (...) Y si existen culpables, es el Estado, en su razonamiento que solo especula y no tiene la suficiente capacidad de enfrentar este flagelo que hasta hoy no tiene solución ...

Carlos Rubén A. - La Gaceta (Tucumán) 17.08.16

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Destruir la vida es muy fácil... aprender a volver a relacionarse y confiar en el otro lleva muchísimo tiempo. Si bien son importantes las medidas de represión y castigo al delito, mucho más importante es la prevención, y ello solo se logra con medidas educativas desde la primera infancia. Y no dudemos que allí hay poco que decir y muchísismo que hacer.

Claudio G. - La Nación 24.08.16

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EL TRABAJO INFANTIL

El domingo 12 de junio fue el día mundial para concientizar sobre el trabajo infantil. Me gustaría compartir con ustedes mi experiencia personal. Desde hace 12 años trabajo en el centro de la ciudad. He visto pasar infinidad de chicos que pìden o venden para sobrevivir. Hoy me toca ver a la segunda generación, es decir a los hijos de aquellos a los que veía pedir o vender hace 12 años (...) Con el paso del tiempo la conducta de algunos de ellos se ha tornado más violente porque han empeorado sus condiciones de vida. En mi inocencia llamé a los servicios de los diferentes estadios  gubernamentales para pedir ayuda (...), jamás vi a nadie interesarse por ellos. Dejen de mirar para otro lado, hagan su trabajo, ellos son nuestro futuro.

Aixa L. - La Capital (Rosario) 14.06.16 

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TÁCTICAS LEGISLATIVAS


Las tácticas de no dar quorum legislativo para determinadas discusiones en el Congreso no es aceptable para los ciudadanos. Votamos a los parlamentarios para que dialoguen, discutan e intercambien opiniones sobre la amplia cantidad de proyectos y problemas que sufre el país, y que todos queremos que se resuelvan. También el verticalismo partidario conspira contra la posibilidad de que los legisladores expresen su opinión personal sobre cada cuestión. El Congreso es una tremenda carga económica para los habitantes del país. Ellos esperan que allí se discutan los temas que preocupan a todos ...

Heriberto F. - La Nación 12.3.16

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ESTRATEGIA ANTIDROGA

... Desde el Estado nos prometen lucha sin cuartel, cosa que sinceramente creo, pero también estoy convencido de que la lucha es absolutamente desigual, si no es ya una batalla perdida. Entonces, ¿por qué no cambiar la estrategia y trabajar sobre el consumo? ¿Por qué los planes de estudios no intensifican en forma contundente la enseñanza sobre las consecuencias del consumo de drogas, tanto en los niveles primarios como secundarios, en los clubes, organizaciones religiosas, sociales, Internet? ¿Por qué es una cuestión de Estado el narcotráfico y no lo son así también las campañas para evitar el consumo? ¿Por qué una parte no menor de la sociedad mira con cierta displicencia el consumo de un porro en cualquier previa y no le asigna a este hecho la misma cuota de horror y espanto con que mira las consecuencias del narcotráfico?  ...


Daniel V. - La Nación 27.01.16

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UTOPÍA


... Claro, pedir actos de grandeza es una utopía, pero los pido. Sabiendo que es quijotesco, los pido. Se ofende en este bendito y gran país la inteligencia de los ciudadanos con inoperancia, impunidad, falta de honorabilidad, claro que reconozco que es el ciudadano el que las deja pasar, pero no será por siempre. Será hasta que los argentinos sepamos conocer derechos y defenderlos, será hasta que sean las políticas de Estado y no las de Gobierno las que rijan. ¿Utopía? No lo creo. Este bendito país cuenta con hombres probos para esa tarea. Este es un país maravilloso, sólo hace falta que su pueblo lo dignifique.

Liliana F. - Clarín 26.10.15

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CANDIDATOS IGNOTOS


... Cuento en una de las listas que se presentan en la provincia de Buenos Aires, 141 candidatos, entre titulares y suplentes. De ellos solo tengo noticias de 14, ya sea por sus actuaciones públicas o por noticias en los medios de comunicación. Es decir un 10%. Creo que las autoridades electorales cometen un serio acto de respeto a la ciudadanía al no exigir a los partidos políticos la posibilidad de acceder a los curriculum vitae de todos los postulantes. Doy por sentado que sus candidaturas han sido aprobadas por esas autoridades, y que cumplen con todos los requisitos legales. No se nos puede poner a los votantes en la situación de elegir cuando carecemos del más elemental conocimiento de los postulante.

Ernesto T. - La Nación 04.08.15

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 PRIMAVERA ANTICIPADA


Una primavera anticipada nos ha llenado las calles de grúas, obreros, de personas prestas a lograr una ciudad próspera y ordenada, sin basura, sin baches, sin caños rotos que derramen el agua que tanto se ha de cuidar. De repente, asistimos al festival de los adoquines, todo pareciera poder parcharse, repararse, renovarse. (...) Parece que esta etapa preelectoral dispone el ánimo del municipio y le da un inesperado giro patriota. Una fundación se ha instalado en una de las cuadras del barrio y se ve gente que va y viene. Canje de cualquier cosa por un voto. Ojalá tuviéramos durante los 365 días del año estas etapas preelectorales que pasan a ser una primavera anticipada antes de que el frío verifique que a las promesas de los políticos se las lleva el viento del olvido y la hojarasca de la corrupción. ¡Dios y la patria os lo demanden!

Graciela J. - La Gaceta (Tucumán) 17.07.15


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 NO SOLO LA VICTORIA

Por lo que muestran las campañas electorales, parece ser que a los candidatos sólo les importa ganar; es el único objetivo que se manifiesta expresamente. Preferiría que los objetivos fueran otros, como solucionar las cosas que andan mal (muchas) y apuntalar las que están bien. Que cada candidato explique cuales son las medidas necesarias y los pronósticos de resultados probables. Pero nadie dice nada de eso y el objetivo principal es solamente la victoria, porque hoy se gana exclusivamente con la imagen y no con las palabras o las ideas ...

Francisco C. - La Nación 06.06.15

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PUBLICIDAD Y HAMBRE

(...) Los gobernantes que publicitan sus actos de gobierno y obras deberían hacer un examen de conciencia, porque deben saber que cada peso que gastan en publicidad no necesaria contribuyen a la mortalidad infantil y adulta; ya que esa importante cantidad de dinero debería ser destinado a vivienda, comida y hospitales. Se puede matar con un arma, se puede matar con la desidia, se puede matar malgastando el dinero público...

 Miguel B. - La Capital (Rosario) 27.11.14 

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LA POLITICRACIA

(...) He llegado a la conclusión de que los políticos son personas distintas. Casi marcianos, como si no fueran gente como uno. Se agrupan entre ellos para conseguir lo que se proponen. Este con este, aquel con el otro. Estruendosamente se dan media vuelta y hacen como que se enojan y se agrupan con otro diferente. Todo para conseguir lo que no nos cuentan, lo que sólo ellos saben. Y hacen de todo para lograr lo único que necesitan de nosotros: que pongamos el sobre en las urnas, autorizándolos para concretar sus privadas y ocultas ambiciones. Planean los discursos previos al voto, las alianzas, los cabildeos. Saben verdades que no nos cuentan jamás. Sólo dicen lo que les conviene que oigamos. Caramba, tengo que tratar de vencer esta tristeza. ¿Cómo hago? Cuando me la explicaron y me gustó tanto, no me dijeron que era así la democracia. Sin embargo, una vez más se acerca la oportunidad de construirla.

Edith M. - La Capital (Rosario) 15.10.14 

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VERDAD DOLOROSA

Ha salido a la luz una verdad dolorosa que muestra la raíz más profunda de nuestro deterioro en todo los ámbitos. Es triste y decepcionante, pero es la realidad. Una gran parte de nuestros empresarios aprueba el soborno con tal de obtener lo que desean. Ellos son una muestra de la sociedad, no la más pobre en lo económico, aunque si tal vez en otros órdenes ...

Luis A. - La Nación 27.10.14

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GENTE SIN TECHO

Quienes viven en situación de calle han sufrido cosas que los demás no imaginan; viven el día a día durmiendo en la calle, con frío, hambre y expuestos a la inseguridad, siendo los más afectados los niños. Nuestra Constitución nacional establece en su artículo 14 bis, que el Estado debe garantizar a todos los ciudadanos, el acceso a una vivienda digna; es una necesidad y un derecho de todas las personas (...) El Estado debe investigar, proponer y aplicar soluciones a los problemas de los más débiles que carecen de recursos; rever las malas obras construidas para que las personas que sí cuentan con vivienda no terminen perdiéndolas (...) Nuestro deber como sociedad es afianzar la justicia. Las escuelas y universidades deberían contar con materias extracurriculares que acerquen al resto de la sociedad a concientizarse sobre estos problemas, y juntos buscar una solución o dar una ayuda. Los que tenemos un hogar somos afortunados, ya que contamos con millones de posibilidades con las que ellos no cuentan ...

Marcela M. y otras firmas - La Gaceta (Tucumán) 26.10.14

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LA NIÑEZ Y LA FUTURA SEGURIDAD

Cuando hablamos de la infancia, decimos las dos niñez: un sector de la sociedad es el del puntocom y el otro sector es el de los niños sin juguetes, sin ropa ni calzados o aún sin  leche ni alimentos. Cada vez que se habla de inseguridad, en mi imaginación sólo se me ocurre la loca fantasía de una niñez feliz para la futura seguridad de la población. (...) Si queremos seguridad, sin proyectos a corto plazo, busquemos como opción la seguridad futura con la infancia feliz. Estado y sociedad deben trabajar allí para el futuro de nuestros hijos, para que ellos sí puedan dormir seguros.

María B. - La Capital (Rosario) 17.09.14


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PROPAGANDA

Es inútil y poco apropiado que los funcionarios inviertan nuestros recursos para mostrarnos por televisión las maravillas que supuestamente hacen, para mejorar su propia imagen. Si tales obras sirven a mucha gente, no hace falta comunicárselas, ya que seguramente lo experimentan diariamente; y si esto no es así, es inútil intentar comunicar lo que de todos modos ya nadie cree que sea cierto si no lo experimenta personalmente ...

Ernesto L. - La Nación 13.06.14

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NIÑOS DE LA CALLE 

Los niños de la calle han dejado de ser visibles. Sin más, sin que la angustia ni la culpa los invada, los responsables a cargo dejaron de verlos (quizás nunca lo hicieron) ¿Qué pasa con esos niños chiquitos que, abandonados, deambulan en los semáforos? Durante el día y también por la noche. Funcionarios y gobernantes pasan a diario al lado de ellos. ¿Tema difícil de resolver? ¿No será que alguna vez habrá que empezar por ahí? Una fuerte, profunda y continuada acción al respecto debería ser urgente y prioritaria en la agenda de cualquier gobierno de turno.

Gustavo G. - La Gaceta (Tucumán) 28.03.14 

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PIEDRA

Estamos siempre frente a lo mismo. Los mismos políticos, que se cambian de vereda, que fueron funcionarios de los que hoy critican, que gastan millones de pesos en publicidad con fondos de vaya a saber dónde salen, que prometen soluciones mágicas cada dos años, que están tan subidos a su ego que se presentan como mesías salvadores de la patria, cuando muchas veces sólo lo son de su bolsillo. Ahí estamos nosotros, los gobernados, siempre tropezando con la misma piedra.

Julio R. - La Nación 02.09.14

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RECICLAJE POLÍTICO 

El reciclaje de residuos es algo casi maravilloso. Se puede salvar no solo dinero, sino tiempo, esfuerzos, etc. El reciclado de políticos a que nos tiene acostumbrado nuestro escenario es absolutamente increible. Escuchando al diputado M. hablar del nuevo proyecto, despegándose del proyecto al que él perteneció hasta ayer, me hace dudar de la capacidad intelectual de estos políticos o de la credulidad o simplemente estupidez de la ciudadanía. Todos estos políticos que se reciclan se han olvidado de su pasado. ¿Quiénes de los actuales funcionarios no fueron parte de la década perdida, como ahora ellos la titulan ? ¿Quiénes de los funcionarios actuales no serán parte del gobierno que vendrá en 2015 ? ...

Rafael M. - La Nación 07.04.14

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(...) Todo se puede hacer pero, hoy, creo -e insisto-que todo el secreto de la eficacia de cualquier modelo se basa en como se establecen los sistemas de control al poder, porque es el poder el que permite la corrupción que afecta la libertad, la autonomía, el bien común, los derechos humanos y, en definitiva la dignidad humana. Es decir que, con una convicción total, no hay democracia viable -la que permite el camino y la garantía de la libertad- sin una lucha real, concreta, eficaz y seria contra la corrupción. El resto son ilusionimos discursivos, utopías engañosas y estafas políticas. Por eso, aún exigimos, democracia, más democracia.

Francisco Juan V. - La Gaceta (Tucumán) 27.04.14

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¿VENDEPATRIA?

Ricardo La Volpe expresó su deseo de que México, país en el que pasó gran parte de su vida, fuera campeón del mundo. Eso bastó para que alguien lo denominara vendepatria. Pensar que yo siempre creí que vendepatrias fueron los que estatizaron la deuda privada, los que en beneficio  de determinados intereses destruyeron la red ferroviaria nacional, los que vendieron y entregaron a precio vil las empresas nacionales, pero se ve que no es así ...

Adrián M. - La Nación 01.07.10


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LAS DICHOSAS ENCUESTAS

Hace unos días, en plena campaña electoral, una persona me paró en la calle y solicitó encuestarme. La primera pregunta fue cual es para mí el mayor problema. La corrupción política le contesté. ¿Más que la inseguridad?, preguntó. La respuesta fue sí. La inseguridad, la falta de justicia, la crisis económica, la balcanización de la sociedad argentina, dividida entre buenos y malos, cuya resultante es que somos todos malos. La notoria pérdida de valores éticos, morales y materiales, la frustración que conlleva adicción, la pérdida de la noción de pertenencia, son todos efectos colaterales de la corrupción política. La Argentina no vive crisis económicas puras, vive crisis producidas por el mal manejo que los administradores políticos hacen del Estado, vivimos en una permanente crísis generada por los políticos (...) Usemos la memoria y el sentido común. ¿Cuál es la resultante de sus gestiones? ¿Cuántos platos rotos tuvimos que pagar? Y lo más importante, con este sistema electoral, ¿ellos representan al ciudadano?, ¿al vecino? -como es el origen y sentido del Congreso- ¿o representan a las cúpulas partidarias? La hierba mala no crece sola.

Julio R. S. - La Capital (Rosario) 31.10.13

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LA CORRUPCIÓN COTIDIANA

Nadie duda de que uno de los flagelos más dramáticos que golpean el presente es la corrupción. Una serie de lugares comunes, de frases hechas, bastardean el tema y pretenden mitigar su importancia, convertirse en mero consuelo y atenuar el impacto de esta epidemia en la realidad. Algunos asumen que se trata de un hecho que sucede en todas las sociedades. Otros creen encontrar cierta tranquilidad diciendo que existe no sólo en el ámbito público, sino también en el privado. Los más se contentan diciendo que siempre existió y que su presencia en el futuro es inevitable.

Lo concreto y contundente es que esa relajada postura no hace más que naturalizar lo inadmisible y, lo que es más grave, subestimar el asunto, hacerlo cotidiano y por ello asumirlo con absoluta resignación.

Alberto M. - La Nación 16.05.12


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PARA ELLOS EL VERANO ES INFIERNO

Debe ser terrible soportar el tórrido calor de estos días en una casilla de chapas y madera, como les pasa a miles de pobres e indigentes que habitan las villas y los asentamientos diseminados en la provincia, sin deternernos en lo que ese tormento significa para los niños, los ancianos y los enfermos. Diriamos que ya están acostumbrados a esa inhumana forma de vida. No saben nada del dólar y los precios. Solo tratan de sobrevivir cada día como pueden. No tienen presente ni futuro. En un escalón más alto aparece el gran número de trabajadores y jubilados que deben subsistir con sus magros ingresos, esforzándose por llegar a fin de mes sin demasiadas deudas, algo cada vez más difícil. El de ellos es un presente árido y lleno de incertidumbre. Y mucho más arriba ubicamos a nuestros representantes y a los funcionario más encumbrados, quienes deberían ocuparse de mejorar siquiera mínimamente la situación de aquellos que la pasan mal. Pero es sólo un deseo, ya que están en otra cosa ...

Miguel A. - La Gaceta (Tucumán) 10.02.14

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DERECHOS SOCIALES VULNERADOS

Rosa sólo debe 4800 euros de la hipoteca que le concedieron sin dificultad. A sus 62 años y pendiente de recibir la Renta Mínima de inserción de la Comunidad de Madrid, día tras día vive con la angustia de la posible pérdida de su casa e intenta encontrar soluciones ante una entidad bancaria que la trata con dureza y no le ofrece respuestas. La historia de Rosa es la historia vergonzosa de millares de familias que en España sufren la vulneración sistemática de derechos. No sólo el derecho a disponer de una vivienda adecuada sino del derecho a su dignidad ...
Triste es que las consecuencias de la especulación creciente que hemos sufrido con este bien de primera necesidad las veamos hoy, día tras día, en cada una de las familias que pierden su hogar. Y triste es que asistamos sistemáticamente a la insensibilidad de un gobierno que desaprovechó la ocasión de reconocer una iniciativa ciudadana, la Iniciativa Legisativa Popular por la dación en pago y el alquiler social, que representaba no sólo recuperar parte de la legitimidad política perdida por nuestros gobernantes, asumiendo como suyas las alternativas propuestas por la sociedad que representan, sino que además desaprovechar la oportunidad de sentar precedentes reconociendo la participación ciudadana a través de las escasas vías  establecidas en nuestro sistema democrático para la participación de la sociedad civil organizada. Y mientras, 184 familias perdieron diariamente su hogar en 2013 según los datos ofrecidos por el Consejo General del Poder Judicial, y con él muchas ilusiones y esperanzas... ¿Y luego nos preguntamos por qué cunde la apatía y desinterés entre la ciudadanía y aumenta el descrédito de la "clase política"?

Gema G. (Madrid)- publicado en Cartas de Lectores de Diario San Rafael (Mendoza) 06.05.14

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 ...Y debemos entender que cualquier gobernante es votado para hacer las cosas bien,  que ningún mandatario ha de esperar que glorifiquen y aplaudan aquello que por ley, mandato popular, ética y sentido común le fue delegado por la ciudadanía: gobernar bien y para todos.

Esteban K. - Clarín 11.06.12

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Nepotismo significa política de sistemático favorecimiento hacia familiares, en cuanto a cargos, privilegios y honores, por alguien dotado de poder, especialmente "político". Habiéndose desatado en la Argentina una carrera para ocupar escaños, rumbo a las elecciones legislativas de octubre, los aprovechadores de siempre, ávidos de riqueza y poder a cualquier precio, no dudan en insertar a sus esposas o parientes en las listas... Las ridículas y falsas sonrisas de los políticos, como publicidades de crema dental, son la cara visible de la desfachatez

Paola R. - La Voz (Córdoba) 25.06.13

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El legado de Favaloro

A catorce años de aquella fatídica tarde de sábado, podemos decir que nos dejó mucho más que aquella carta cargada de dolor e impotencia. Una pléyade de médicos nos forjamos en el camino que laboriosamente él abrió y sus enseñanzas llegan hoy a miles de pacientes, todos los días, en los lugares más recónditos de la Tierra. Sin embargo, el verdadero legado aún yace bajo el polvo de la indiferencia: sus valores. La honestidad a ultranza, la sencillez, su concepción del trabajo, su compromiso con la comunidad, su perspectiva de la ciencia. Como todo gran hombre, supo trascender las limitaciones de su propia humanidad.

Ricardo L. - La Nación 29.07.14

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 ...debemos ocuparnos del presente pero también del futuro: lo que hagamos con la economía y con la naturaleza nos afecta y tambien a nuestros descendientes, aunque no los veamos, lo que no es un dato menor.

Eduardo R. - La Gaceta (Tucumán) 23.08.12

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Descreído de la política

Debo reconocer que no estoy muy apasionado últimamente con la política en la Argentina. Ningún candidato me convence, siento que nos han mentido tanto que se pierde en general la credibilidad. Los hechos de corrupción que suceden y seguirán sucediendo, la Justicia muy lenta, el Congreso sin tratar todavía los temas profundos para una Argentina del presente y del futuro. Obvio que creo en la democracia, pero descreo de nuestros candidatos. Para recuperar un poco de esperanza habría que exigirles que nos digan lo que van a hacer y cómo.

Proyectos claros y creíbles. Cómo van a combatir la inseguridad, la inserción progresiva en la sociedad de las drogas, cómo van a generar trabajo, educación, cómo van a mejorar la prevención en la salud. Y así infinitos temas que muchas veces son asignaturas pendientes. Y por favor que dejen de importarles más la confección de listas y alianzas que el real fondo de la cuestión: hacer de la Argentina un país creíble, serio y en progreso constante.

Roberto F. - La Capital (Rosario) 29.06.11

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Siempre hay una excusa para la dependencia y la injusticia social. Hoy se llama globalización. La cuestión es que el hombre no solamente está triste, también está angustiado de tanta presión ejercida por corporaciones económicas voraces para las que toda inversión en poco tiempo debe ser un gran negocio. Así, poco a poco, las 8 horas de trabajo diario, las 44 semanales, el descanso dominical, los feriados y otros logros, fueron borrados sistemáticamente en el mundo del trabajo. Se suponía que el desarrollo tecnológico mejoraría la calidad de vida, las condiciones de trabajo, abarataría los costos de los productos y otros beneficios. Nada de eso ocurrió, por el contrario,  la robótica viene a desplazar al hombre en el proceso de producción...

Francisco L. - La Capital (Rosario) 22.01.14

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 ...Pero tanto a nivel gobierno como oposición, hay una tendencia de ver al otro como el demonio, que hace todo mal, uno mira la discusión política y pareciera estar mirando la película de la guerra de las galaxias, o la saga del señor de los anillos, donde el bien se enfrenta con el mal, sólo que cada uno dícese ser el bien ...

Pablo Martín G. - El Territorio (Posadas) 07.05.13

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  ¿Acaso sentirán miedo cuando dejen el poder? 

Me pregunto si los goberanantes corruptos no se aferran al poder con todas sus fuerzas, más ungidos por un "poquito de miedo" a rendir cuentas de sus desvaríos que por el afán de continuar en el cargo. Y en ese sentido, la intensidad de ese anhelo va de la mano con la profundidad de la corrupción ...

F. G. - Clarín 15.10.12

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Falsa democracia

No creo en esta falsa democracia electoral, en la cual cada cuatro años firmamos un cheque en blanco y se lo entregamos al «menos peor» de los candidatos, para que una vez instalado en el poder lo invada una misteriosa amnesia que le imposibilita cumplir con sus promesas electorales.
Considero que si no se ejerce una participación activa y persistente por parte de la ciudadanía sobre nuestros representantes para que rindan cuentas y administren correctamente el acervo público durante el transcurso del mandato, seguiremos cayendo en los mismos errores de siempre y esperando falsamente que cada cuatro años resurja un iluminado que nos salve.

Claudio B. - La Nación 07.08.11

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Pibes de barrio

Por esas cosas de la vida, mis padres se mudaron del centro a la zona sur de esta ciudad. Éramos chicos, mi hermano y yo. No nos importaban las razones de esa decisión. Lo que recuerdo muy bien es que tuvimos que acostumbrarnos a caminar por esas calles de tierra rodeadas de zanjas, las mismas que en épocas de verano hacían el habitat de toda clase de insectos, ranas, sapos y hasta ese olor nauseabundo que se te penetraba hasta los huesos, si uno tenía la mala fortuna de caer adentro de una de ellas. Pero éramos felices. Había potreros para jugar a la pelota, trepar a los árboles, andar en bici, jugar con los amigos a las escondidas, a la mancha, a las figuritas, a las bolitas; mientras nuestros padres y vecinos se sentaban a la puerta. Todos disfrutaban. Cuando el calendario indicaba alguna fiesta, todo el mundo en el barrio, la respetaba. ¡ Qué carnavales inolvidables!, mezcla de barro y agua. ¡ Y qué decir de los 29 de junio! San Pedro y San Pablo. Nos preparábamos desde temprano. Todos a juntar ramas, troncos y maderas que sirvieran para quemar, además de pedir ropa que no se usaba para fabricar enormes muñecos. Nadie nos dijo nunca si era una fiesta religiosa o de tradición pagana. Nosotros no lo sabíamos. Sólo queríamos divertirnos. Ese día se hacía la "gran fogata", se quemaban los muñecos con ropa y todo, pero no nos olvidábamos de dejar un huequito en la base para cocinar los camotes asados en brasas que luego comíamos. ¡ Qué ricos! Todos corríamos, saltábamos y reíamos. Al terminar nuestros padres nos venían a buscar. Nos íbamos con la cara tiznada, las manos sucias, a la vez, satisfechos y llenos de ilusión. Con el tiempo llegué a comprender que esos maravillosos sueños de pibe de barrio marcaron nuestro destino. Y hoy veo, tristemente, que esos mismos sueños de tantos pibes, se les consumen irremediablemente en el fuego ardiente de la droga.

Alicia B. - La Capital (Rosario) 02.07.12

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LA DROGA Y LA DESPENALIZACIÓN

El término "drogas" podría incluir a todas y la legalización puede involucrar distintas etapas tales como el consumo, suministro y producción. No parece razonable creer que la mera legalización creará nuevos adictos, ni hará que los actuales aumenten sus dosis. Hoy, quien quiere consumir lo hace, incluídos los adolescentes. Algunas cifras que grafican el mapa del consumo de drogas en la Argentina, muestran que los más afectados son los niños, adolescentes y jóvenes. Según informa una encuesta, realizada por el Sedronar, en diez años se triplicó el consumo de marihuana entre los estudiantes de la escuela secundaria (...)

Julio G. - La Gaceta (Tucumán) 24.01.14

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NARCOTRAFICO

En la Argentina hay ausencia de políticas integrales en materia de control del narcotráfico.
Esta problemática debería ser incorporada en forma urgente en la agenda del oficialismo y de la oposición. Tenemos que ser conscientes de que una vez que el narcotráfico se instala en un país cambia la vida de sus habitantes para siempre. No hay tiempo que perder.

Gabriela M. –La Nación – 09.09.11

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LOS CHICOS DE LA CALLE

Están a toda hora. A altas horas de la noche o por la mañana. Se agrupan en las esquinas sobre la avenida 9 de Julio o en muchas otras de nuestra ciudad y de otras ciudades. Con la audacia que da la triste experiencia de sus vidas jóvenes se acercan a los coches y peatones a pedir una ayuda. Son los chicos de la calle. Abandondados por quienes deberían cuidarlos también lo están por los gobernantes que tienen la obligación de dar seguridad y protección a los más vulnerables. Hay una preocupación por denunciar un bache o una avería de la gran ciudad y hasta por una página de internet se puede hacer el reclamo. Pero estos chicos, salvo para los ciudadanos comunes que pasamos a su lado, son invisibles para las autoridades y siguen estando donde no deben estar. Los discursos y proyectos para atacar el narcotráfico, mejorar la educación y la inclusión social olvidan de mirar la realidad de todos los días y generar soluciones para los indefensos que viven entre el abandono familiar y la indiferencia del poder ...

Matías R. - La Nación 24.03.14

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LA POLÍTICA Y LOS INDIGENTES

De los jóvenes niños marginales que nacen producto de la incomprensión de una sociedad que a priori los estigmatiza, sin tener oportunidades de ser, no tienen pertenencia porque nadie contuvo a su familia para que fueran responsables a la hora de la paternidad. Vemos a diario las notas de canales que se meten

en el corazón mismo de las villas miserias, trayendo a nuestros hogares calefaccionados y con algún plato de comida a mano, las desgracias que padecen aquellos que fueron traídos al mundo sólo para sufrir. Vivo en el conurbano bonaerense, en todos lados se ven mujeres que no pasan de los 20 años con 2, 3 ó 4 hijos sin padres a la vista, abuelas de 36 años, así se repite un círculo del que en el futuro será muy difícil salir, una coyuntura que aporta todos los días niños que no tienen ni tendrán acceso al estudio, a la vital comida diaria indispensables para crecer sanamente, carecerán de estudios elementales, de la apropiada atención médica y otras necesidades que más los sumergirá, dependiendo de un Estado benefactor, que los somete a la peor degradación del ser humano, cortarle la creatividad. Entonces, aquellos que estamos en la vereda de enfrente, que parámetros de igualdad con nuestros semejantes tendremos para sentirnos en la seguridad que somos una sociedad que no genera tanto resentimiento, mientras hay miles de niños que mueren todos los días por consumo de drogas, alcohol, prostituyéndose para disponer de dinero, para retroalimentar un círculo vicioso del que no saldrán, símplemente porque no pueden. Nadie se ocupa de ellos, a nadie les interesa, pero un día serán muchos más los carenciados que usarán los políticos de turno, sin crear una verdadera malla de contención social.

DNI 8.6340.022 - La Capital (Rosario) 10.07.13

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ABANDONADOS

Dos niños con el cansancio a cuestas: de pobreza,

necesidades, privaciones y marginalidad fingen dormir o duermen en la calle Mendoza al 500, 19 horas de un día que se me ocurre igual para ellos que no sienten el paso del tiempo pero sí su peso. Una caja de cartón grande, como su esperanza de una jornada productiva, es depositaria de las limosnas de los transeúntes. (...) ¿Las autoridades no ven esta lastimosa postal urbana? ¿Nadie acude a dar soluciones de fondo a la mendicidad infantil y a los peligros que los acechan? El obsceno 36% para "gastos sociales", al ver estos cuadros, es una cachetada a la ética y el sentido común de los ciudadanos, impotentes testigos de las falencias que carcomen los cimientos de la democracia ...

E. - La Gaceta (Tucumán) 03.02.13

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DESIGUALDADES

El delito es directamente proporcional a la desigualdad social: a mayor franja de desigualdad entre los que más y menos tienen, más hechos delictivos se van a producir. Ahora bien, si tenemos alguna intención de disminuir la ecuación delictiva, debemos prevenir antes que actuar sobre el hecho consumado. Para ello es esencial satisfacer las necesidades básicas ...  

(...) La seguridad es un efecto, no una causa. No se puede aspirar a vivir con seguridad en una sociedad de desigualdad obscena y carente de necesidades medulares

Eduardo T. - La Nación 20.09.13

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VIOLENCIA EN TV

No soy de ver televisión, tal vez por eso me indigné tanto al ver que en un noticiero pasaron reiteradamente el asesinato de un empresario argentino en P. Me pregunto cuanta pasividad hay en la gente que lleva a que en televisión se pueda mostrar un asesinato real, con disparos y cuchillazos en un horario donde muchos chicos ven la televisión. Los directivos del canal y los que controlan los abusos en el horario de protección al menor, ¿en qué están pensando? ... 

Gerardo M . –La Nación – 03.06.13

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UNA HERRAMIENTA  POSIBLE

Dicen que hay muchos psicólogos en la Argentina, pregunto: ¿no se podrán poner en las empresas como forma preventiva? Porque creo que el señor que mató a Tomás, seguramente algún indicio de insanía mental habría dado, ¿no? ¿O será que no se le da la verdadera importancia a esta disciplina? Quizás se la circunscriba solamente a lo privado, al consultorio. Pero debe y puede cumplir una función social preventiva. Para eso hay que invertir y creer en esta ciencia. Para esto es necesario contar con profesionales comprometidos éticamente.

Silvia I. - Clarín 22.11.11

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MENORES Y DELITO

 ...Cuando hablamos de niños delincuentes y hasta de asesinos no se piensa que el Gobierno de la Nación debe hacerse cargo de este problema. No caben dudas sobre la complejidad de esta problemática. También debe quedar claro que estos chicos no nacieron así y aunque suene paradojal, ellos mismos son víctimas de una sociedad exitista y declamatoria , sumergida en pobreza, hambre y desesperación...Quizás alguien, con demasiada ligereza, hable de los niños asesinos, para evitar referirse a la perniciosa negación de una realidad socioeconómica desigual, injusta y no resuelta, que no sólo los ha convertido en lo que son, sino también les puso un cuchillo o un arma en sus manos. Entonces cabe preguntarse: ¿quiénes son los verdaderos asesinos?

Héctor Leonardo B. - La Gaceta (Tucumán) 03.02.11

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Pacientes del Borda

Ignorando las minucias de la situación que sufre el hospital Borda, me pregunto cómo es posible que los pacientes internos y ambulatorios hospitalizados en esa institución estén a merced del frío por la carencia de gas. Vivir sin gas en una ciudad como la nuestra es, sin duda alguna, infrahumano.

En este año electoral las idas y venidas entre el gobierno nacional y el gobierno de la ciudad se intensificarán sin duda alguna, estamos ya acostumbrados a ello. Entiendo las vicisitudes de la política, pero no entiendo la canallada de condenar a cientos de personas al hacinamiento, la insalubridad y la mala alimentación. Las canalladas rápidamente se tornan en crímenes.

Agustín Pedro C. - La Nación 13.05.11

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Manos a la obra

Poco a poco, como permitiendo un acostubramiento, va creciendo la anomia en nuestra sociedad. La desviación de las conductas individuales se torna normal, por la frecuencia con la que ocurre. A nadie sorprende hoy ver a un motociclista violando semaforos rojos, a un vendedor callejero ofreciendo mercadería "trucha", a un BMW sin chapa patente, a un lavadero en plena vía pública. Probablemente las autoridades todas ignoren el profundo daño que causan al tejido social al permitir masivamente estas desviaciones y tantas otras que sería imposible enumerar. Cada día que pasa sin un cambio de actitud por parte de nuestros servidores públicos responsables, torna más difícil e regreso a la normalidad, por lo que quisiera invitarlos a que cuanto antes pongan manos a la obra. Para eso se les paga.

Miguel R. - La Gaceta (Tucumán) 24.10.13

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Caminante, no hay camino 

Muchos, muchísimos santafesinos circulamos por esta provincia desorientados, confundidos, cargados de desesperanza. El domingo 22 emitiremos un voto. ¿Qué elegiremos con ello: candidatos o el destino de nuestra provincia? No es menor lo que estaremos haciendo. Cómo será de importante que todos los candidatos, sin excepción, se desesperan y gastan fortunas, tiempo y un gran esfuerzo por convencernos que son los mejores. Prometen lo que saben muy bien que no van a poder realizar. Ya en el poder, se volverán sordos a los reclamos por incumplimientos. Es evidente que como pueblo hemos crecido, porque ahora de esta patraña nos hemos dado cuenta. Quizás sería más provechoso que el despliegue de dinero que están malgastando lo destinaran a hacer campañas de prevención de enfermedades, enviar alimentos al Hogar del Huérfano o a diferentes comedores barriales. Nos aseguran haber caminado la provincia. "Se hace camino al andar" ¿Qué camino eligieron ustedes? Desde mi humilde lugar de colaboración que es un grupo de ayuda, les cuento que con todas las ONGs que he hablado, ninguna fue entrevistada por prometedores caminantes. ¿Por qué? Los años y la democracia me han permitido votar muchas veces, por lo que observando la campaña, veo que ha sido realizada con el mismo molde de siempre, como si el tiempo no hubiera transcurrido. Solamente debe ser más costosa con más tecnología. Siempre de espaldas a las verdaderas necesidades del pueblo al que una vez más se pretende convencer con estribillos ensordecedores y papeles que la gente arruga y luego tira con dolor. Realmente penoso. Deberemos votar porque es obligatorio, si no creo que sólo lo harían los obsecuentes de turno. Así como están dadas las cosas ganará una vez más un grupo de candidatos porque el pueblo va a perder como siempre. ¿Creen que me equivoco, caminantes.

Edith M. - La Capital (Rosario) 19.05.11

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Nos miran..., ¡mirémoslos!

Hace ya unas semanas, empezaron a aparecer, ahora ya están por todas partes, nos miran. Se presentan "bien prolijitos", sin arrugas, muy maquillados, con amplia y digitalizada sonrisa. Están ahí, en los afiches y carteleras, son los candidatos políticos y nos miran. Se muestran como nunca, tal vez como no son, tal vez como no serán. Quieren seducirnos. Pretenden nuestro acompañamiento con el voto. Se acuerdan -ahora- de nosotros. Mañana, una vez cumplidos sus objetivos, tal vez nos olviden hasta nuevas elecciones. Mirémoslos, veamos qué nos quieren decir y qué realmente nos dicen desde sus afiches y más adelante desde las publicidades en los distintos medios. Sin hacer una enumeración taxativa ni pretendiendo que sean los únicos elementos a analizar, en mi modesta opinión, deberíamos nosotros, los ciudadanos, prestarle atención a algunos de los puntos siguientes: 1) Veamos cuánto se respetan entre ellos, a fin de evaluar cómo convivirán una vez elegidos; si uno pega sus afiches sobre los del otro, ¿se respetarán en el futuro? Si los amigos de ayer son los enemigos de hoy y viceversa, si lo que antes apoyaban ahora critican ¿cambiarán así su compromiso con la ciudadanía? 2) Veamos cómo respetan lo nuestro; si hoy no dudan en pasar por alto la legislación y hacen publicidad en lugares y formas prohibidas -pasacalles, por ejemplo- o con pegatinas o pintadas en nuestros frentes o cartelería, ¿respetarán las leyes una vez elegidos? ¿Y nuestros derechos? ¿Y nuestra propiedad? 3) Analicemos qué nos dicen con sus publicidades. Todos los afiches presentan la cara del candidato y un slogan o frase publicitaria. Entendamos que no es nada más que eso, una frase publicitaria, no un compromiso con la ciudadanía o la plataforma política. Prestémosle atención a qué nos tratan de decir, reparemos en el hecho de que la mayoría nada dice -léase nada de compromiso-, pero en aquellos que pretenden decir algo y poco, casi todos hablan de "ellos", de "sus virtudes", son pocos -no sé si alguno, acaso- los que nos dicen qué y especialmente cómo van a hacer para solucionar aquello que nos preocupa a los ciudadanos de a pie. ¿Saben de nuestras necesidades o sólo les preocupan las propias y sus intereses políticos y personales? La lista podría continuar, pero para darle un corte, analicemos un último ítem, todos se presentan como "a estrenar", como si no hubiesen tenido pasado político ("joya nunca taxi") y debutarán ahora, olvidan y fundamentalmente pretenden que olvidemos, qué prometieron en períodos anteriores y no cumplieron, si traicionaron o no sus propuestas y cómo actuaron cuando debían hacerlo. Basta recorrer un poco las calles, ver los afiches y corroborar que en algunos casos sus promesas de hoy fueron sus omisiones del pasado, o las mismas. ¿Qué hicieron entonces en todo este tiempo? Si ellos lo han olvidado, no lo olvidemos nosotros. El acto electoral es la única oportunidad que el pueblo tiene para expresarse y elegir lo que necesita. ¡Aprovechémoslo! ¡Elijamos bien! Recordemos que quienes elijamos no serán un electrodoméstico inocuo, con garantía y sujeto a la ley de defensa del consumidor. No hay devolución, no hay cambio si fallan dentro de las 72 horas y fundamentalmente sí afectan nuestra salud y nuestras vidas, y vienen para quedarse. Por todo esto, si ellos nos miran, ¡mirémoslos! Para finalizar, una aclaración, seguramente no todos los candidatos son como los describo, como en todos los órdenes hay excepciones, entonces enfoquemos nuestro voto a alguna.

 

Jorge C. - La Capital (Rosario) 26.02.11

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Las políticas de Estado

En Argentina se ha instalado la expresión "políticas de Estado" con el deformado significado que es la política nacional que el pueblo sostiene y defiende. En nuestro país "el pueblo no delibera sino por medio de sus representantes" (CN art.22) pero los llamados sus representantes en el Congreso, representan a partidos políticos, no representan al pueblo. Nunca consultan o explicitan a sus mandatarios las razones por las cuales han aprobado, rechazado, o cajoneado leyes o incumplido sus obligaciones legales que institucionalmente los obligan. Tampoco si han controlado u observado las a veces graves arbitrariedades o imprevisiones del Poder Ejecutivo. El pueblo es solo un espectador, un convidado de piedra sin derechos ...

Marcelo C. - La Capital (Rosario) 21.09.13

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 Quilmes florece con las elecciones

(...)Todo tiene intencionalidad política y no se puede negar que las obras aparecen  cada vez que hay elecciones. Un antes y un después existen en tiempos electorales. Quilmes florece con la llegada de las elecciones para el uso de la casta política, luego no existe.

Mirta R.  - Clarin 19.09.13

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 LAS COSAS COMO ESTÁN

Resulta interesante leer algún aviso que requiera la incorporación de nuevo personal a cualquier empresa: aspectos académicos, idiomas, conocimientos de informática y el conocido "inútil presentarse sin referencias". No es el caso de la administración pública nacional. Allí reina, soberana, la discrecionalidad para llegar a los más altos escalones previstos en la actividad del Estado nacional. Por eso tenemos la permanente presencia de algún funcionario que pueda asegurar el perfecto estado de las cosas como están.

Ricardo J.S. - La Nación 04.05.12

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Me pregunto permanentemente si a mis 64 años deberé continuar con la esperanza de disfrutar como ciudadano de una clase dirigente que asuma la función pública como una verdadera vocación y no como un medio para obtener beneficios personales. Alguna vez entenderán que la función pública es un mandato popular y el funcionario debe ejercer esa función respondiendo a ese mandato, o sea, estar al servicio de la gente y no servirse de ella. Administrar dineros públicos es la labor de un funcionario totalmente honesto, son dineros que deben volver a la gente que lo eligió y puso toda su confianza en el, deben volver en obras de salud, educación, mejoramiento de la calidad de vida, ayuda social. El funcionario debe tomar conciencia que cada peso que no llega a la gente va a otra cosa y esa otra cosa no es más ni menos que una traición al ciudadano que lo eligió y confió. Los que creemos en Dios sabemos que ese tipo de acción es un pecado mortal porque cada peso que no llega a su destino es un chico que pasa hambre, un enfermo que no recibe asistencia, una calle que no se repara con sus consecuencias, falta de dinero para control, orden, en fin tantas cosas que la gente espera y no llega. Para terminar diré que vocación en la función pública significa responder con honor y honestidad al mandato popular, es una función casi sagrada porque busca mejorar la calidad de vida de los hombres y mujeres que esperan este milagro hace mucho tiempo, pero seguramente con la esperanza de poder lograrlo y disfrutarlo como ciudadanos de este bendito país.

Rafael Luis V. / La Capital (Rosario) 25.03.11

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BUEN NEGOCIO

En la Argentina es buen negocio ser funcionario público. No lo digo sólo por la jubilación de privilegio, sino porque desde 1983 hubo 5100 causas de corrupción contra funcionarios públicos, pero sólo tres condenados, tanto por absoluciones como porque las causas prescribieron o las "hicieron prescribir".

Cristian B. - La Nación 25.04.12

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"Leí con bastante sorpresa el editorial del lunes 14 de marzo referido al default de la deuda, en el que se habla de la necesidad de reestructurar la que se encuentra pendiente, de honrarla, de la supuesta demonización del FMI; surge de la totalidad de la nota que la soberanía se construye cumpliendo con las obligaciones que tiene el país. Y digo sorpresa, porque este diario publicó en el año 1999 una extensa nota sobre la investigación de la deuda externa que llevaba adelante el Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal N° 2.
"Primeramente, creo que las deudas no se honran. Se pagan si se deben y si no se deben no se pagan, y se impugnan ante la pretensión de alguien de cobrar lo que no corresponde. Y cuando se habla de la deuda externa pareciera que existe un deliberado desconocimiento de su real constitución y negociación.
"Se ignora que en ese tribunal federal existen tres causas penales en trámite, donde se investigan las distintas refinanciaciones de la deuda hasta 2005, en las cuales hay pericias, declaraciones de auditores del Banco Central, testimonios de funcionarios, documentos que evidencian la existencia de numerosos fraudes, ilegalidades y aun delitos de acción pública cometidos por funcionarios y empresarios privados cuya deuda fue estatizada en 1982.
"Se ignora el probado perjuicio económico que significaron las distintas refinanciaciones que no fueron consensuadas a través de una libre contratación, sino impuestas por la banca acreedora, con la complicidad también probada del FMI, del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo, que para esto violaron sus reglamentos y sus cartas constitutivas. Le aclaro que esto no es una apreciación personal, sino que presenté ante la justicia federal las pruebas respectivas.
"Se ignora que el modelo de fraudes e ilegalidades para el endeudamiento argentino y sus refinanciaciones fue igual en otros países y en uno de ellos, Ecuador, se pudo acceder a todos los archivos, que mostraron cómo había sido el mecanismo fraudulento empleado por los acreedores con la complicidad de los funcionarios. Como miembro de la Auditoría de ese país lo pude verificar cabalmente.
"Este singular proceso de ilegalidades que nadie se atreve a viabilizar cabalmente fue advertido por conocidos juristas, como el embajador Espeche Gil, el doctor Salvador M. Lozada y el doctor Augusto M. Morello, en la Argentina; los doctores Sandro Schipani y Pierángelo Catalano de la Universidad de Roma; Antonio Colomer Viadel, de la Universidad Politécnica de Valencia; André Franco Montoro, ex gobernador de San Pablo, entre una lista de ilustres estudiosos que por demasiado extensa me abstengo de citar
."Para no abusar del espacio, pareciera que también se ignora que el Código Civil argentino y los principios básicos del derecho administrativo determinan que los actos ilegales son nulos de nulidad absoluta, así como todas sus consecuencias. ¿Cómo es posible, entonces, que lo ilegal pueda ser honrado y refinanciado?"

Alejandro Olmos Gaona Ex miembro de la Auditoría del Ecuador - LA NACION 13.04.11

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La ciudadanía no sale de su asombro al leer que en 2010, 43 diputados, no dijeron una sola palabra. Esos legisladores no tendrían que haber cobrado los suculentos sueldos que perciben para que en un año no presenten un solo proyecto de ley para sus provincias. Mis recuerdos van para el doctor Alfredo Palacios, que pedía el uso de la palabra y hablaba por espacio de una hora para fundamentar un proyecto que quería que la Cámara aprobara. Hasta los propios opositores terminaban aplaudiéndolo. Hoy, nuestros legisladores, como norma no asisten a la sesión por injustificadas razones, y cuando lo hacen y esta se prolonga, las cámaras de televisión los muestran a algunos dormitando. Eso nos hace pensar que dedicarse a la política, tiene sus beneficios, como ser cobrar para dormir, crearse una buena imagen, dentro y fuera del partido que lo represente, sonreír siempre, máxime en sus visitas a los barrios. Siempre estrenan ropa, calzados, llegan en vehículos de alta gama, y hablan con los habitantes de zonas marginales, rodeados siempre de custodios, que no permiten que se les acerquen demasiado. Hablarán con sus punteros políticos para escuchar sus demandas, ya sea por planes sociales, ropa, trabajo, alimentos, etcétera. Sus promesas seguirán hasta que nuestra ciudadanía despierte de su letargo, y los hombres que nos representen, sean los más idóneos, que con sus leyes sancionadas, velen por el "bien común", y no por el propio. Una razón más para luchar por una buena democracia, tan necesaria en la provincia en que vivimos.

Jorge Antonio C. / La Gaceta (Tucumán) 20.11.01

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Ya es hora de otro libro "Nunca más", esta vez con los datos de cada asesinado y con un homenaje a cada uno de ellos, para concientizar a toda la sociedad del gran daño que estos asesinatos provocan en las familias y en la sociedad misma. Para evitar esta terrible violencia hay que trabajar ya mismo con todos los niños de 5 años en adelante y hacer un plan de redistribución de la población, hacer barrios con accesos para los servicios de agua potable, luz, salud, educación y limpieza. No es tan costoso e imposible, simplemente hay que organizar a la gente, pues florecen las villas y la indigencia fomentada por los mismos punteros políticos. Basta pasar por la autopista del Buen Ayre y ver los asentamientos y el peregrinar de todos los días hacia el CEAMSE. Un chico creado en esas condiciones está inexorablemente empujado a la delincuencia. Si hubiera una política de Estado, esos mismos terrenos divididos en lotes con accesos y los servicios mínimos podrían darle dignidad y perspectiva de progreso. Pero han edificado arriba de montañas de basura, con todas las enfermedades que esto trae: debemos atacar las causas y estamos atacando el efecto. Por más que bajemos la edad de imputabilidad y los matemos a todos también. Si los niños de 5 años se crían de esa formas volveremos a tener las mismas consecuencias. Empecemos de nuevo, que los posibles asesinos de 2020 hoy tiene 5 años.

José Luis C. / Clarín 16.12.08

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Es notable que los arquitectos, a través de sus  asociaciones profesionales y facultades de arquitectura, no hayan sido convocados a colaborar masivamente en el angustiante problema del déficit habitacional. Son ellos quienes aportarán el concepto "hacer viviendas es hacer ciudades". Si no, vamos a repetir experiencias de los 70, en que los barrios se convirtieron en nuevos guetos y algunos de ellos tuvieron que ser demolidos. En Europa se están rompiendo la cabeza para reciclar esos conjuntos masivos que también fracasaron y se deterioraron con el tiempo. Es interesante observar la experiencia chilena de la mano del arquitecto Aravena, que minimizó el costos de un módulo inicial, luego completado por los usuarios. Vale recordar que en los años 80 tuve la suerte de realizar un pequeño grupo experimental de 10 viviendas con participación del usuario, aplicando las teorías de soportes del arquitecto holandés John Habraken. Se trabajó con los usuarios junto con sociólogos y psicólogos. Es interesante volver 20 años después, a la entrada de La Plata, y observar cómo han ampliado sus viviendas y mejorado el espacio público propio del conjunto. Los arquitectos tenemos mucho que decir y hacer. Y ayudar.

Jaime Grinberg Profesor FADU, UBA La Prensa - 19.12.10

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¿Más cárceles o mejores condiciones de vida?

La inseguridad es uno de los problemas más graves que afronta nuestro país y regularmente se escuchan casos en los que hay menores involucrados en la delincuencia. Ante esto me pregunto: ¿Es una solución bajar la edad de imputabilidad y así, llenar al sistema penal de nuevos convictos, sin que este pueda ofrecer una solución apropiada para el total de la población? ¿O tal vez sería mejor reforzar la educación, los sistemas de salud, las viviendas, la situación laboral y en general, la vida de la población? ¿Acaso no disminuiría así la delincuencia? No podemos solucionar un problema tan grande como la inseguridad con sólo una reforma al Código Penal: es necesario un sinfín de políticas estatales destinadas a mejorar los aspectos recién nombrados. Debemos tener en cuenta que todos los habitantes de nuestra nación tenemos el mismo derecho a desarrollar vidas dignas y que el Estado no puede sacrificar a unos cuantos en favor de la seguridad del resto. Entonces, creo que lo indicado sería debatir distintas propuestas para asegurar el bienestar general, en lugar de bajar la edad de imputabilidad, que únicamente garantizaría del bienestar de algunos.

Alejandra Agustina M. - La Gaceta (Tucumán) 31.01.11

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